DETALLE DE LA OPINION
Propósitos educativos al 2021
Por :Idel Vexler
El Diseño
Curricular Nacional (DCN) de la Educación Básica Regular (EBR), cuya modernización –y mejor articulación– se ha pues
to en ejecución el presente año, incorpora propósitos educativos al 2021 para orientar el trabajo pedagógico de esta modalidad educativa que atiende a alrededor de 8 millones de escolares en las instituciones públicas y privadas.
Muchos maestros y actores educativos tienen expresiones favorables sobre dichos propósitos, que son: el desarrollo de la identidad personal, social y cultural en el marco de una sociedad democrática, intercultural y ética; el dominio del castellano para promover la comunicación entre todos los peruanos, así como la preservación de la lengua materna y promoción de su desarrollo y práctica.
Son esenciales, además, el conocimiento del inglés como lengua internacional; el desarrollo del pensamiento matemático y de la cultura científica y tecnológica para comprender y actuar en el mundo; la valoración del medio geográfico, la historia, el presente y el futuro de la humanidad mediante el desarrollo del pensamiento crítico.
También son propósitos de la EBR: la comprensión del medio natural y su diversidad, así como el desarrollo de una conciencia ambiental orientada a la gestión de riesgos y del uso racional de los recursos naturales, en el marco de una moderna ciudadanía; el desarrollo de la capacidad productiva, innovadora y emprendedora, como parte de la construcción del proyecto de vida de todo ciudadano.No podían estar ausentes los referidos al desarrollo corporal y conservación de la salud física y mental, al desarrollo de la creatividad, innovación, apreciación y expresión a través de las artes, las humanidades y las ciencias; y, desde luego, al dominio de las Tecnologías de la Información y Comunicación.
Para tal efecto, el DCN considera logros específicos para cada nivel educativo y competencias que articulan dinámicamente capacidades mentales y motrices, así como contenidos conceptuales y actitudinales en las diferentes áreas curriculares del plan de estudios vigentes.
Evidentemente estas grandes finalidades del currículo escolar traen consigo la necesidad de desarrollar clases activas, participativas innovadoras y útiles. Y, lógicamente, intensificar las acciones de política educativa destinadas, por ejemplo, a tener mejores maestros, espacios pedagógicos apropiados, textos y materiales educativos significativos, tecnologías educativas pertinentes, gestión efectiva y ética, así como evaluaciones permanentes a profesores y alumnos para tomar decisiones de mejoramiento educativo. Todo ello para tener mejores alumnos.
Además, la sociedad y el Estado deben priorizar y dar énfasis a la atención de los factores familiares, sociales, culturales y económicos, que, como sostienen los estudios de la UNESCO, influyen en la calidad y equidad de los sistemas educativos.No está de más reiterar que los diseños constituyen un resumen de intenciones educativas y de aprendizajes previstos que cobran su real dimensión cuando se evidencian en desempeños humanos eficientes y con valores, en el marco de la formación integral de nuestros niños, niñas y adolescentes.
Lo señalado será posible, sin duda, si asumimos con motivación, optimismo, perseverancia y espíritu positivo la tarea educativa para que estos propósitos, progresivamente, se conviertan en realidad. El desafío está planteado y nos compromete a todos.
Propósitos educativos al 2021
Por :Idel Vexler
El Diseño
Curricular Nacional (DCN) de la Educación Básica Regular (EBR), cuya modernización –y mejor articulación– se ha pues
to en ejecución el presente año, incorpora propósitos educativos al 2021 para orientar el trabajo pedagógico de esta modalidad educativa que atiende a alrededor de 8 millones de escolares en las instituciones públicas y privadas.Muchos maestros y actores educativos tienen expresiones favorables sobre dichos propósitos, que son: el desarrollo de la identidad personal, social y cultural en el marco de una sociedad democrática, intercultural y ética; el dominio del castellano para promover la comunicación entre todos los peruanos, así como la preservación de la lengua materna y promoción de su desarrollo y práctica.
Son esenciales, además, el conocimiento del inglés como lengua internacional; el desarrollo del pensamiento matemático y de la cultura científica y tecnológica para comprender y actuar en el mundo; la valoración del medio geográfico, la historia, el presente y el futuro de la humanidad mediante el desarrollo del pensamiento crítico.
También son propósitos de la EBR: la comprensión del medio natural y su diversidad, así como el desarrollo de una conciencia ambiental orientada a la gestión de riesgos y del uso racional de los recursos naturales, en el marco de una moderna ciudadanía; el desarrollo de la capacidad productiva, innovadora y emprendedora, como parte de la construcción del proyecto de vida de todo ciudadano.No podían estar ausentes los referidos al desarrollo corporal y conservación de la salud física y mental, al desarrollo de la creatividad, innovación, apreciación y expresión a través de las artes, las humanidades y las ciencias; y, desde luego, al dominio de las Tecnologías de la Información y Comunicación.
Para tal efecto, el DCN considera logros específicos para cada nivel educativo y competencias que articulan dinámicamente capacidades mentales y motrices, así como contenidos conceptuales y actitudinales en las diferentes áreas curriculares del plan de estudios vigentes.
Evidentemente estas grandes finalidades del currículo escolar traen consigo la necesidad de desarrollar clases activas, participativas innovadoras y útiles. Y, lógicamente, intensificar las acciones de política educativa destinadas, por ejemplo, a tener mejores maestros, espacios pedagógicos apropiados, textos y materiales educativos significativos, tecnologías educativas pertinentes, gestión efectiva y ética, así como evaluaciones permanentes a profesores y alumnos para tomar decisiones de mejoramiento educativo. Todo ello para tener mejores alumnos.
Además, la sociedad y el Estado deben priorizar y dar énfasis a la atención de los factores familiares, sociales, culturales y económicos, que, como sostienen los estudios de la UNESCO, influyen en la calidad y equidad de los sistemas educativos.No está de más reiterar que los diseños constituyen un resumen de intenciones educativas y de aprendizajes previstos que cobran su real dimensión cuando se evidencian en desempeños humanos eficientes y con valores, en el marco de la formación integral de nuestros niños, niñas y adolescentes.
Lo señalado será posible, sin duda, si asumimos con motivación, optimismo, perseverancia y espíritu positivo la tarea educativa para que estos propósitos, progresivamente, se conviertan en realidad. El desafío está planteado y nos compromete a todos.
